26.3.06

Alejandra Pizarnik

EL DESPERTAR

a León Ostrov

Señor
La jaula se ha vuelto pájaro
y se ha volado
y mi corazón está loco
porque aúlla a la muerte
y sonríe detrás del viento
a mis delirios

Qué haré con el miedo
Qué haré con el miedo

Ya no baila la luz en mi sonrisa
ni las estaciones queman palomas en mis ideas
Mis manos se han desnudado
y se han ido donde la muerte
enseña a vivir a los muertos

Señor
El aire me castiga el ser
Detrás del aire hay mounstros
que beben de mi sangre

Es el desastre
Es la hora del vacío no vacío
Es el instante de poner cerrojo a los labios
oír a los condenados gritar
contemplar a cada uno de mis nombres
ahorcados en la nada.

Señor
Tengo veinte años
También mis ojos tienen veinte años
y sin embargo no dicen nada

Señor
He consumado mi vida en un instante
La última inocencia estalló
Ahora es nunca o jamás
o simplemente fue

¿Còmo no me suicido frente a un espejo
y desaparezco para reaparecer en el mar
donde un gran barco me esperaría
con las luces encendidas?

¿Cómo no me extraigo las venas
y hago con ellas una escala
para huir al otro lado de la noche?

El principio ha dado a luz el final
Todo continuará igual
Las sonrisas gastadas
El interés interesado
Las preguntas de piedra en piedra
Las gesticulaciones que remedan amor
Todo continuará igual

Pero mis brazos insisten en abrazar al mundo
porque aún no les enseñaron
que ya es demasiado tarde

Señor
Arroja los féretros de mi sangre

Recuerdo mi niñez
cuando yo era una anciana
Las flores morían en mis manos
porque la danza salvaje de la alegría
les destruía el corazón

Recuerdo las negras mañanas de sol
cuando era niña
es decir ayer
es decir hace siglos

Señor
La jaula se ha vuelto pájaro
y ha devorado mis esperanzas

Señor
La jaula se ha vuelto pájaro
Qué haré con el miedo

(N.W.th.: A Alejandra de Sábato teria escrito assim, heteronìmicamente poética fosse)

Englishmen's burden

A recente proibição do fumo em locais públicos fechados não atinge, segundo a lei aprovada pelo Parlamento britânico, "instalações de ultramar".
Não é por outra razão que as Armas da Nossa República ostentam, estreladas, ramas de café e de tabaco.

22.3.06

João Carlos Martins



É verdade, no filme nem se menciona o lance com o Maluf e tal. Vi-o. E fui atrás dos discos (força de expressão, nestes tempos de pirataria louca).
Ouçam-no, é o que diria aos comparsas interessados. Em tempo, ele (irmão doutro eminente pianista, José Eduardo Martins, em cujo estudo sobre Debussy a gente aprende a pasmar diante de filles aux cheveux de lin) e Glenn Gould são os únicos primatas, até o presente da redação desta humílima homenagem, que completaram a gravação das obras para teclado de Bach. Em cravo e clavicórdio há outras versões. Não é de estufar o peito e tremular bandeirinhas, num comício?

8.3.06

Abscena

Periquitos

Esse negócio de exército na rua - metranca aninhada em canteiros gramadinhos e tudo - nunca pode ser legal. Coreograficamente, inclusive, os matizes da camuflagem e certos modelos de blindados remetem, é forçoso admitir, à representação bananish de forças armatas idioléticas em quintos mundos de filmes roliúdi de categoria ainda ulterior - Mr. Chuck Norris atesta-o com especial e sempiterna bravura.
Coadjuvam-se numa tal caracterização o estrito cumprimento de uma tarefa imbecil e o panorama vastíssimo dos morros sem reboco.

5.3.06

Ela vem da Ásia













Finalmente uma paranóia realmente real: Ela vai chegar, e arrebentando.
(confirmam-no os sempre decantados "especialistas").
Na última (1968), 1,5 milhão esquinizaram-se para o outro mundo.
Impossível negar: será uma limpa das boas.

4.3.06

Alumbramento inzoneiro

O texto lido pela apresentadora de um telejornal de cujo nome quero esquecer-me - tratava-se de uma inserção vivinha da silva, straight from Los Angeles, sobre a dourada noite dos óscares - poderia perfeitamente, com algumas poucas adaptações nos toponímicos, onomásticos e cifras, passar pela locução de uma matéria sobre o desfile das escolas de samba do Rio, e terminava: "uma festa em que nada pode dar errado".
Pobre gosta de luxo, Trinta dixit.